Peaky Blinders es una de las grandes series televisivas de los últimos años. Gracias a un fantástico trabajo de ambientación, unas locas aventuras y sobretodo un plantel de actores espectacular, la serie ha conseguido enganchar a miles de aficionados.
Como muchos de estos fenómenos televisivos, no es de extrañar que se intenten extender al mundillo del videojuego. Algo que en muchas ocasiones es sinónimo de desastre. Aun así, con este Peaky Blinders: Mastermind, no estamos ante ningún desastre, aunque tampoco ante un juego perfecto. Desarrollado por FuturLab, estamos ante una adaptación muy original. Si quieres conocer todos los detalles de esta nueva aventura de los Shelby, no te pierdas nuestro análisis.
Todo queda en familia
Antes de adentrarnos en la jugabilidad, tenemos que mencionar que el juego es una precuela de lo acontecido en la serie. Esto hace que en el momento que tomamos el control de la familia, Tommy aún no ha tomado el control total. Por tanto este lanzamiento nos propone vivir una aventura inédita en el entorno televisivo. La historia en este sentido no es espectacular, pero sigue la tendencia que hemos visto en muchos episodios de la serie. Eso sí, es una pena que las escenas se nos cuenten a través de viñetas de texto, contar con doblaje hubiese sido todo un lujo.
Por otro lado, el juego nos ofrece la oportunidad de controlar a varios de sus personajes más icónicos, como son los hermanos Shelby, Ada, o incluso Polly. Cada uno de los personajes cuenta con habilidades únicas que nos permitirán superar los niveles.
Dicho esto, cabe mencionar que el título cuenta con un apartado técnico bastante limitado. Pero es cierto que saben disimular bastante bien sus problemas, gracias en gran parte a una cámara cenital que nos aleja bastante de la acción.
Aún así, sus escenarios cuentan con un buen detalle, mostrando localizaciones clave de la serie como el pub o las calles de Small Heath. Los personajes, a pesar de la distancia de la cámara son reconocibles y distinguibles entre sí, ver a Tommy Shelby andar nos transporta irremediablemente a las intros de la serie. Todo esto viene acompañado por una gran banda sonora que sigue la misma estela que los temas utilizados en cualquier episodio.
En busca del plan maestro
Dejando a un lado los apartados técnicos, ¿qué es lo que busca este Peaky Blinders: Mastermind? Pues bien, la propuesta de este juego sorprendió desde el momento que se mostró su primer tráiler, y es que estamos ante un título de puzzles. Aprovechando la premisa de que Tommy es todo un estratega, el juego nos propone que planifiquemos nuestras acciones para cumplir con diferentes objetivos.
Para llevar a cabo esta planificación, podremos controlar el tiempo. Accediendo al menú de planificar podremos retroceder o avanzar en el tiempo. Esta mecánica es fundamental, ya que tendremos que coordinar y gestionar a varios personajes para que el plan salga tal y como queremos. Por ejemplo, deberemos accionar una palanca con un Finn, mientras volvemos atrás en el tiempo para controlar a Tommy y cruzar la puerta en el mismo momento que se acciona la palanca.
Como decimos, la coordinación temporal de nuestras acciones será vital para cumplir con nuestros objetivos. Además, tendremos que gestionar de forma inteligente a los personajes ya que cada uno como decimos tiene una función que realizar en nuestros planes. Las mecánicas son bastante interesantes y en los últimos niveles ganan una buena dosis de complejidad. La verdad es que resulta muy interesante ver el enfoque que se le ha dado a esta producción.
Circuito cerrado
Aún así, el principal problema de este juego es que sólo existe un camino. Los puzzles funcionan como circuitos cerrados en los que tienes que hacer las acciones en un orden y una forma determinada. Esto es un gran varapalo, ya que hace que rápidamente se vuelva repetitivo. Aparte de esto existen varios problemas en el control que hace que tardemos más de la cuenta en realizar las acciones que tenemos en mente.
El hecho de retrasarnos en un grave problema, ya que el juego nos propone que superemos sus niveles en tiempo récord para así obtener una calificación. Un buen punto, pero que en muchas ocasiones se ve lastrado por el hecho de ser un circuito cerrado.
Hay que tener en cuenta, que el juego únicamente cuenta con 10 niveles, los cuales podremos superar en su totalidad entre 2 o 3 horas dependiendo de nuestra habilidad. Por tanto, la compañía ha querido darle cierta rejugabilidad al juego, ofreciendo estos desafíos contrarreloj, además de algunos coleccionables que encontraremos por el mapeado.
En definitiva, Peaky Blinders: Mastermind es una buena e interesante adaptación de este peculiar universo televisivo. No obstante, arrastra varios problemas que empobrecen el resultado final. Su limitado apartado técnico no se siente realmente como un gran obstáculo, pero el hecho de que sus puzzles sólo se puedan resolver de una única forma o algunos problemas en su control son detalles que afectan de lleno a la experiencia jugable. Si te ha gustado este análisis, recuerda que tienes muchos más justo aquí.
Acerca del autor
Psicólogo amante de los juegos cooperativos, el RPG y de disparar a todo aquello que se mueva.